LA ESPAÑA PROFUNDA CON EL GORE

Sangre, sangre, sangre..

Por fin se ha acabado la llamada Semana Santa, una fiesta sin sentido en la que se conmemora la tortura de un señor hace dos mil años.

Me gustaría saber qué pasaría si todos los años cortáramos el tráfico para pasear muñecos con las caras de las víctimas de las mayores tragedias de la historia de España (no quiero poner ejemplos pero todos tenemos en mente cuales han sido los grandes crímenes), supongo que, con razón, sería un escándalo, por lo que no entiendo el sentido de estas procesiones que encima algunos se empeñan en relacionar con la cultura de nuestro país.

Aunque, claro, no se de que me extraño, supongo que estamos hablando de la misma gente que considera que clavarle pinchos a un animal hasta su muerte es "la fiesta nacional".

Es que es verdad, aquellos que disfrutan con la imagen de un Cristo ensangrentado son los mismos que deben pagar la entrada para contemplar como carniceros vestidos de mariquitas martirizan a ese animal indefenso que, eso sí, algunas veces se cobra su venganza y consigue clavarle los cuernos a aquellos que pretenden, EXCLUSIVAMENTE POR DINERO, su injusta muerte.

Es curiosa esa parte de la España profunda obsesionada por la sangre que no pierde ocasión de disfrutar de su espectáculo favorito: EL GORE EN VIVO.

En fín.. que ganas tenía de retomar el blog.

Volvemos a la carga amigos.